Tener una intolerancia alimentaria no debe ser un obstáculo para disfrutar de un buen postre. Por este motivo, hoy he decidido hacer y catar unos flanes con leche de avena.
El resultado son unos riquísimos flanes que nada tienen que envidiar a los que se hacen con la leche de vaca.
Ingredientes (8 raciones)
4 huevos
4 cucharadas de fructosa (en su defecto, 4 cucharadas de azúcar)
1 cucharada de azúcar vainillado
300 ml de leche de avena
Caramelo líquido
Preparación
Ponemos a calentar el horno a 200 grados.
Ponemos caramelo líquido en el fondo de las flaneras. Yo he utilizado flaneras individuales, pero se puede hacer en una única flanera grande (o molde para horno).
Ponemos en el vaso de la batidora los huevos, la fructosa y azúcar vainillado. Batimos hasta que esté bien mezclado. Yo he utilizado una batidora eléctrica con las varillas. Incluimos la leche de avena y volvemos a batir.
Volcamos el contenido en las flaneras y cubrimos éstas con papel de aluminio.
Preparamos una fuente de horno (en la que quepan todas las flaneras), ponemos las flaneras dentro y llenamos con agua hasta que sólo sobresalgan un par de centímetros las flaneras. Es importante que el nivel del agua no supere el de las flaneras, porque no queremos que entre agua.
Metemos la fuente con las flaneras en el horno. Bajamos la temperatura a 180 grados y dejamos así 45 minutos.
Pasado este tiempo, abriremos el horno y pincharemos (con un pincho de brocheta). Si el pincho sale limpio ya se puede apagar el horno y sacar los flanes. En caso contrario dejaremos 5 minutos más y volveremos a pinchar (así hasta que salga limpio).
Dejar enfriar a temperatura ambiente y posteriormente meter en la nevera un mínimo de 4 horas.
Presentación
Se desmolda el flan sobre un plato pequeño y lo acompañamos con fruta o nata (se puede utilizar nata vegetal para los intolerantes a la proteína de leche, nata sin lactosa para los intolerantes a la lactosa o nata normal).
¡Ha salido riquísimo! ¡Anímate a endulzar tu día!