Ayer tomé gazpacho, y me sobró parte de la guarnición, así que he decidido aprovecharla en otra comida deliciosa; pollo agridulce.

Ingredientes (2 raciones)

2 pechugas de pollo fileteadas o cortadas en cuadrados

1 pepino

1 tomate

1 cebolla

1 pimiento verde

2 cucharadas de aceite

3 cucharaditas de azúcar

1 chorrito de salsa de soja

1 chorrito de vinagre de arroz o de vino

3 cucharadas de tomate frito

1/2 vaso de agua

Preparación

Pelamos, lavamos y cortamos en daditos el pepino y la cebolla.

Lavamos y cortamos el tomate y el pimiento.

Echamos una cucharada de aceite en una sartén y lo ponemos a fuego medio-alto. Incorporamos los ingredientes preparados.

Cuando estén blandos y la cebolla se haya vuelto más transparente, incorporamos la salsa de soja, el vinagre, el tomate frito, el azúcar… y 10 segundos después el medio vaso de agua. Dejamos que reduzca durante 3 minutos a fuego alto.

Por otro lado, en otra sartén, echamos la otra cucharada de aceite y la extendemos con un pincel de silicona. Si las pechugas de pollo son fileteadas podemos cortarlas en tiras. Ponemos el fuego alto y echamos el pollo en tiras o troceado. Daremos la vuelta cuando esté dorado (no llega al minuto). Cuando esté dorado por los dos lados, sacaremos de esta sartén e iremos incoporando al resto para mantenerlo calentito.

¡Ya podemos servirlo y disfrutarlo!

Nota: Si quieres puedes acompañarlo como yo de arroz blanco.

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