Cuando se acaba el huevo batido y estamos empanando, por ejemplo, croquetas o setas, nos planteamos batir otro. Pero si la cantidad a empanar es muy pequeña, podemos echar un pelín de leche a lo que nos queda de huevo batido para ampliar la cantidad y no necesitar batir otro. El resultado es muy satisfactorio y nos evita pensar qué hacer con el huevo sobrante si hubiéramos batido otro.
Un comentario en “Truco para empanar cuando se acaba el huevo”